SANTIAGO, 13 Ago. 18 (ACI Prensa).- La justicia chilena confirmó haber recibido la primera denuncia en contra de un obispo chileno en ejercicio, por el presunto delito de abuso sexual.
El acusado, según reveló la Fiscalía Regional del Bío Bío el 10 de agosto, es Mons. Carlos Pellegrin, Obispo de la Diócesis de Chillán.
Tras la difusión de la acusación, Mons. Pellegrin, aseguró tener su conciencia “totalmente limpia”.
“Me he enterado a través de una emisora nacional sobre la noticia que entregó la fiscal de Concepción en relación a una denuncia en mi contra. Para mí es la primera noticia que tengo, no he tenido ningún oficio ni información de la Fiscalía. Obviamente que me impacta la noticia”, dijo a la prensa local el 10 de agosto.
El prelado de 60 años señaló que una vez enterado de la noticia se puso en contacto con las autoridades y manifestó su disposición de colaborar en la investigación.
“Me presentaré cuando me llamen, pero estoy a la absoluta disposición de ese llamado para aclarar todas las dudas. Mi conciencia está totalmente limpia, me siento libre de corazón y creo que esto habrá que saber de qué se trata y yo confío en la justicia de Chile, y al igual que como todo ciudadano, estoy a disposición de ella”, afirmó Mons. Pellegrin.
Nueva investigación previa y resultados de caso Precht
Por otra parte, el Arzobispado de Santiago informó el 10 de agosto la apertura de una investigación previa en contra del sacerdote David Vera Andrade, por presunto abuso sexual de un menor de edad.
Las investigación tiene un plazo de 60 días y busca indagar en hechos ocurridos antes del año 2012. Como medidas cautelares, el presbítero quedó apartado del oficio de párroco de la Parroquia Apóstol Santiago y del ejercicio público sacerdotal. Además se le fijó residencia en Santiago.
Asimismo, “conforme a los lineamientos definidos por la Conferencia Episcopal de Chile el pasado viernes 3 de agosto de 2018, y reiterando el compromiso de colaborar con la justicia, hemos solicitado el consentimiento al denunciante para entregar su nombre a la Fiscalía”.
El Arzobispado de Santiago también informó que el 7 de agosto envió a la Congregación para la Doctrina de la Fe los resultados de la investigación contra el sacerdote Cristián Precht Bañados, por antecedentes de “eventuales abusos contra menores, aparecidos en el contexto del denominado caso Maristas”, causa ya iniciada en el Ministerio Público.
“Al sacerdote se le impusieron medidas cautelares, por lo que no puede realizar actos públicos propios del ministerio sacerdotal y se le ordenó residir en Santiago”, sostiene el comunicado.
En cuanto a la salud del Arzobispo de Santiago, Cardenal Ricardo Ezzati, ingresado el 9 de agosto al Hospital Clínico de la Red de Salud UC CHRISTUS para un control de rutina de marcapaso, la arquidiócesis señaló que fue dado de alta al mediodía del 11 de agosto.
La Fiscalía Regional de Rancagua citó al Cardenal Ezzati a declarar el 21 de agosto por su eventual responsabilidad en el delito de encubrimiento de casos de abuso sexual, de poder y de conciencia.
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