Bangui (Agencia Fides) - Algunos rebeldes del Ejército de Resistencia del Señor (LRA), grupo armado de origen ugandés que causa estragos en una vasta zona comprendida entre el sur de Sudán, al norte-este de la República Democrática del Congo y la República Centroafricana, han comenzado a deponer las armas.
“Se trata de unos sesenta hombres con sus esposas y sus hijos”, dice a Fides Mons. Juan José Aguirre Muñoz, Obispo de Bangassou, en el sureste de la República Centroafricana.
“Los rebeldes del LRA se han dividido en varios grupos. Y uno de ellos ha decidido deponer las armas”, ha dicho el obispo. “Este grupo se reunió en un área a unos treinta kilómetros de la ciudad de N'Zako. Se ha creado una situación de emergencia humanitaria debido a que los ex guerrilleros y sus familias están en necesidad de todo. Dos organizaciones no gubernamentales han enviado a sus representantes para llevar ayuda a estas personas, pero los militares Seleka presente en N'Zako los han arrestado con la acusación de no estar autorizados para entrar en la zona” dice Mons. Aguirre.
Seleka es la coalición de movimientos rebeldes que tomaron el poder en Centro-áfrica, después de haber expulsado al ex-presidente François Bozizé.
“Es un asunto serio, porque ante un primer gesto de paz importante por parte de los rebeldes del LRA, que han depuesto las armas y pedido reintegrarse en la sociedad, la intervención de los militares Seleka amenaza con hacer fracasar todo” concluye Mons. Aguirre. (L.M.) (Agencia Fides 1/10/2013)
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