XXV aniversario de la JMJ en Santiago de Compostela
«Esta Iglesia que camina en la historia y en el mundo os necesita y precisa de vuestro coraje, de vuestro empuje, de vuestro entusiasmo, de vuestra generosidad. La Iglesia en Santiago, «hogar espacioso y de puertas abiertas…, a impulso de una fe siempre joven», os anima con afecto a proseguir esta peregrinación desde vuestra entrega libre a lo que os pida el Señor». Así se expresa el arzobispo compostelano, Mons. Julián Barrio, en una Carta Pastoral con la que celebra el XXV aniversario de la JMJ de Santiago en 1989.
1/08/14 11:03 AM | Imprimir | Enviar
(SIC/InfoCatólica) En la carta, titulada «Bienvenidos a la Casa del Señor Santiago», el Arzobispo invita a los jóvenes que están peregrinando estos días a la ciudad del Apóstol para conmemorar este acontecimiento, a vivir la fe con entusiasmo y alegría. «La Iglesia en Santiago», asegura Mons. Barrio, «os bendice y se alegra con vuestra presencia joven».
Mons. Barrio asegura dar «gracias a Dios con vosotros por vuestros padres, por vuestras familias, por la Iglesia que os cuida y alimenta con el pan de la Palabra y de la Eucaristía. Esta Iglesia que camina en la historia y en el mundo os necesita y precisa de vuestro coraje, de vuestro empuje, de vuestro entusiasmo, de vuestra generosidad».
Vocaciones en la JMJ de Santiago
El prelado, al recordar el acontecimiento de la JMJ de Santiago en 1989 indica que «estoy seguro de que aquellos que eran jóvenes en 1989, unos descubrieron su vocación al matrimonio, otros a la vida consagrada y otros al ministerio sacerdotal. Así he tenido la oportunidad de oírlo no pocas veces, subrayando la riqueza espiritual de la Iglesia en el seguimiento de Cristo. En este sentido los que participaron en la JMJ en Santiago pudieron escuchar al Papa cuando dijo: «Cristo os envía en su lugar para ser mensajeros de la verdad, para ser sus testigos en el mundo, concretamente, ante los demás jóvenes como vosotros, porque muchos de ellos hoy, en el mundo entero, están buscando el camino, la verdad y la vida, pero no saben a dónde ir».
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