La organización internacional hizo esta demanda en su resolución emitida con motivo de los cinco años de las muertes del fundador del MCL, Oswaldo Payá Sardiñas; y del también activista del movimiento, Harold Cepero, ocurridas el 22 de julio de 2012 en el oriente de la isla.
La ODCA reiteró su reclamo “de una investigación internacional independiente para aclarar las causas y circunstancias de las muertes de Oswaldo Payá y Harold Cepero, sustentado en el hecho que -después de 5 años- los informes cubanos no han logrado despejar las dudas razonables de la comunidad internacional”.
La Organización Demócrata Cristiana de América recordó que el mismo día de la muerte de ambos opositores pacíficos “advirtió las ‘contradictorias versiones’ sobre este lamentable hecho y demandó a las autoridades cubanas una investigación transparente, convincente y definitiva”.
“Ante el nulo avance en el esclarecimiento de la muerte de ambos disidentes, demandó el 31 de agosto de 2012 una investigación internacional independiente a través de los mecanismos de la Organización de Naciones Unidas”, añadió.
El régimen de Raúl Castro afirmó que se trató de un accidente vehicular. Sin embargo, el testimonio de Ángel Carromero –el español que conducía el vehículo en el que viajaban los disidentes–, y los mensajes de texto enviados ese día a España y Suecia, y que fueron mostrados públicamente por el MCL, señalan que fueron sacados de la carretera por un auto del gobierno. Además, la familia de Payá advirtió que el gobierno no le ha dado acceso a la necropsia del cuerpo.
“El pasado 22 de julio se cumplieron 5 años de esos fatales acontecimientos sin que exista aún una investigación imparcial y convincente”, denunció el Comité Directivo de la ODCA en su documento publicado en Buenos Aires (Argentina), el viernes 28 de julio.
Con respecto a los presos de conciencia, la Democracia Cristiana de América ha advertido que en Cuba “la disidencia política ha seguido sufriendo encarcelamiento, persecución, hostigamiento e intimidación por el solo hecho de reclamar sus derechos y una vía democrática para participar en la construcción de su país”.
Entre ellos se encuentra Cardet, quien es además uno de los dos vicepresidentes adjuntos para Cuba de la ODCA.
El líder del MCL fue detenido violentamente el 30 de noviembre de 2016 cerca de su vivienda en Holguín (Cuba) y delante de su familia y amigos. Aunque las autoridades comunistas lo acusaron de “atentado contra las fuerzas del orden público, escándalo y desorden público”, el MCL advirtió que se trata de una represalia por su labor al frente del movimiento y sus críticas al legado del fallecido dictador Fidel Castro.
Tras un juicio donde “fue todo manipulado” por el Gobierno de Cuba –denunció su esposa Yaimaris Vecino–, Cardet fue condenado en marzo de 2017 a tres años de cárcel.
En su resolución, la ODCA también respaldó “el derecho a regresar y vivir en Cuba del Portavoz del MCL, Regis Iglesias Ramírez, y de todos los exiliados cubanos”. Iglesias, uno de los 75 exprisioneros de conciencia de 2003, se encuentra actualmente exiliado en España.
La Organización Demócrata Cristiana de América llamó a reconocer el “derecho ciudadano a elegir y ser elegidos” de la población cubana, “tal como demanda la iniciativa ‘Un Cubano, Un Voto’, presentada por el MCL a la Asamblea Nacional del Poder Popular el 12 de julio de 2016.
Finalmente, expresó su apoyo a “las iniciativas del MCL y de otras fuerzas opositoras cubanas que demandan una transición pacífica a la democracia y la recuperación de los derechos públicos para garantizar la participación libre de todos los cubanos en la construcción de un camino propio hacia la libertad y la reconciliación”.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 18 de julio de 2017
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