La Generalidad de Cataluña se niega a devolver las obras de arte religioso del monasterio de Sigena

(El Mundo/Heraldo/InfoCatólcia) Ayer martes se cumplía el plazo dado por la magistrada del Juzgado de Instrucción número 1 de Huesca, Carmen Aznar, para que hiciera llegar al Gobierno de Aragón el «plan de retorno» de los bienes, cuyo plazo de entrega se cumple el próximo lunes.

Ante el anuncio de dicha negativa, los servicios jurídicos del Gobierno aragonés solicitarán hoy a la jueza que autorice la entrada en el museo de la técnico perito y de la secretaria judicial, y pedirán asimismo el auxilio de la Brigada de Patrimonio de la Policía Nacional o de la unidad homóloga existente en la Guardia Civil para «incautar los bienes y hacer que regresen al monasterio de Sijena».

Así lo ha anunciado este martes la consejera de Cultura, Mayte Pérez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno aragonés:

«Esperaremos hasta esta noche a ver si nos llega alguna comunicación de la Generalitat. Si esto no sucede, cosa que me temo por experiencia, pediremos permiso a la juez para entrar al museo».

La juez tendría tres días para autorizar la entrada al Museo de Lérida que en caso de ser positiva se produciría el día 31 de este mes, fecha en que termina el plazo de entrega dado por el juzgado.

La consejera calificó de «muy grave» y de «provocación insoportable» que la Generalidad «haya anunciado, con toda tranquilidad, que va a incumplir la sentencia».

Respecto a la petición de auxilio de la Policía para recuperar los bienes, Pérez ha afirmado que se trata «de un paso más para evitar que el Gobierno catalán vuelva a reírse no solo de la Justicia, sino de todo Aragón».

Entre otras razones, la Generalidad argumenta para no devolver las obras la catalogación de estas piezas como patrimonio catalán, la imposibilidad de dividir la colección del museo, el relevo en la consejería de Cultura o los recursos presentados a la resolución del juzgado oscense.

Precisamente dicho juzgado ha emitido este martes un nuevo auto desestimando el recurso de reposición de la Generalidad por el cual alegaba que la sentencia era inejecutable. La juez recuerda que las sentencias está para cumplirlas y que el Gobierno catalán debía presentar el plan de retorno de las obras. En caso contrario tanto el actual como el anterior consejero de Cultura de la Generalidad, Lluís Puig y Santi Vila, respectivamente, incurrirán en responsabilidad penal.

El Gobierno de Aragón ha instalado ya en los antiguos dormitorios del monasterio de Sijena el mobiliario que permitirá exponer las 44 obras de arte. Ha invertido más de 400.000 euros en rehabilitar y acondicionar los antiguos dormitorios y la sala capitular del monasterio.

En la actualidad, allí se puede visitar la exposición de 51 de los bienes que Cataluña devolvió en julio de 2016. Entonces, la Generalidad incumplió el fallo judicial de retornar la totalidad de los 97 bienes, 53 estaban en el Museo Nacional de Arte de Cataluña y regresaron a Sijena 51, puesto que la Generalidad dijo que las 2 piezas restantes estaban extraviadas; y no devolvió los 44 depositados en el Museo de Lérida.

Siguen un proceso judicial diferente la reclamación de las pinturas murales, del siglo XIII, de la sala capitular del monasterio de Sijena. Ardieron durante la Guerra Civil y fueron trasladas para su restauración a Barcelona, donde están expuestas en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, en calidad de «depósito».

En este caso, también existen sentencias y plazos incumplidos para su retorno, el último en noviembre de 2016. La Generalitat argumenta para no devolverlas la imposibilidad del traslado y que las pinturas podrían sufrir un daño irreparable si son arrancadas de su soporte.

El gobierno catalán, tranquilo

Entre el equipo jurídico del Gobierno catalán, sin embargo, hay cierta tranquilidad ante la que se perfila será firme postura de la Generalidad de no librar los objetos artísticos esa jornada, como se apunta desde el entorno del flamante consejero de Cultura, Lluís Puig, que sustituyó a Santi Vila hace apenas tres semanas. Agosto es un mes inhábil judicialmente, de ahí, según esas fuentes, que la juez eligiera esa fecha: la magistrada preferiría evitar la imagen de las fuerzas de seguridad entrando en el Museo de Lleida y requisando las obras. El calendario judicial tampoco le ayuda mucho: la Audiencia aún no se ha pronunciado por lo que respecta al núcleo duro de las alegaciones, en un retraso que supera ya los dos años.

De hecho, la petición de que la juez ordene la entrada en el Museo de Lérida con la intervención policial para resolver el caso ha sido un recurso muy utilizado tanto por el Gobierno aragonés como por el propio Ayuntamiento de Villanueva de Sijena, que habrían solicitado este recurso al menos en una veintena de ocasiones.

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