Celebran Navidad con reclusas, niños migrantes y familias pobres en Chile
Chile, 26 Dic. 18 (ACI Prensa).- En Chile se realizaron distintas iniciativas para celebrar la Navidad con aquellos que anhelan la esperanza en esta importante fecha: las reclusas, los niños y las familias pobres.
De esta forma, el Arzobispo de Santiago, Cardenal Ricardo Ezzati, llegó el 24 de diciembre hasta el Centro Penitenciario Femenino de San Joaquín para celebrar la Misa con las internas y el personal de gendarmería.
"El Señor viene en medio de la privación de libertad de ustedes. Viene en el acontecimiento del dolor de estar lejos de la familia y de las personas que uno quiere. Viene de una sociedad en la cual muchas veces el abuso, que tiene tantas formas, se hace presente con la voz poderosa y potente del poder humano”, dijo el Cardenal Ezzati.
“Viene en medio de una realidad donde hermanos y hermanas llegan a Chile, como llegan a tantas partes del mundo, buscando acogida, buscando mayor dignidad, buscando un lugar donde poder resurgir y que les den esperanza para su vida, imitando a María y a José", agregó.
Al finalizar la Misa las reclusas presentaron una danza acompañada de villancicos y todos los presentes compartieron en fraternidad.
También en Concepción, sur del país, la pastoral penitenciaria junto al Arzobispo Fernando Chomalí, celebraron una Misa en el Centro Penitenciario Femenino de la ciudad, el pasado 21 de diciembre.
Acompañar a las internas en esta fecha especial “es un signo muy importante de evangelización y realidad cristiana, a pesar que han cometido un delito y pese a estar en la cárcel no han perdido su dignidad; no han perdido su condición de hijas de Dios y siempre deben estar abiertas al perdón, a recomenzar sus vidas”, dijo el Arzobispo de Concepción.
Otra iniciativa, orientada a las familias de escasos recursos, es la tradicional “Navidad en la Calle” organizada por la Pastoral Universitaria de Santiago.
De esta forma, más de 250 voluntarios visitaron comedores solidarios, cités, hogares de adultos mayores y dos casas de acogida para mujeres víctimas de violencia, para llevar un momento de alegría a través de la oración, villancicos, actividades recreativas y una liturgia.
Hacia el norte del país, la Diócesis de Calama realizó la campaña "Misión Noche Buena" para entregar cientos de cajas de alimentos no perecibles a familias que fueron afectadas por un incendio y otras de escasos recursos, cotejadas por la Pastoral Social Cáritas del lugar.
También, unos 300 niños, hijos de migrantes residentes en Santiago, celebraron la Navidad con actividades recreativas, payasos, golosinas y entrega de regalos.
La actividad se realizó el pasado 22 de diciembre en la Parroquia Latinoamericana y ayudó a que las distintas familias que se han integrado a la comunidad durante el 2018 compartieran en fraternidad y se alegraran en esta fecha tan importante lejos de su país de origen.
Mauro Burgos, venezolano disfrazado de “viejito pascuero” o Papá Noel manifestó emocionado que lo que hace junto a su familia es “agradecer y devolver la mano por todo lo que Chile le entregó a mi familia cuando llegaron como migrantes”.
“Ojalá que estos niños que hoy están recibiendo regalos y compartiendo puedan también tener un mejor desarrollo más adelante. La Navidad es una fiesta para estar en familia y compartir”, añadió.
Publicar un comentario