“Es un medio que no comunica solo un conjunto de noticias, de ideas, de músicas sin un hilo conductor, y que podría solo buscar distraer y quizás divertir, sino que es un medio de primer orden para llevar la esperanza, aquella verdadera que viene de la salvación llevada por Cristo Señor, y para ofrecer una nueva compañía a tantas personas que tienen necesidad”.
El Papa recibió en audiencia esta mañana en la Sala Clementina del Vaticano a la “Familia mundial de Radio María” –formada en gran parte por voluntarios–, que reflexiona estos días en un congreso en Italia sobre su carisma.
“Tengan siempre presente que ustedes donan algo grande y único: la esperanza cristiana, que es un bien más que un simple consuelo espiritual, porque se funda sobre la potencia de la Resurrección, testimoniada con la fe y las obras de caridad”.
El Santo Padre recordó que Radio María nació con el objetivo “de ayudar a la Iglesia en la obra de evangelización” y hacerlo “con la cercanía a las preocupaciones y a los dramas de la gente, con palabras de consuelo y de esperanza, fruto de la fe y del compromiso de solidaridad”.
En esta tarea “ustedes se fían de la Providencia, que no ha hecho faltar nunca los medios para las necesidades cotidianas: para la modernización de la tecnología, en modo de disponer de instrumentos al paso del tiempo, y para el desarrollo de la radio”.
“A este respecto –añadió–, el reto es mantener el estilo sobrio, incluso en la búsqueda de los instrumentos adecuados”.
El Papa también manifestó que la difusión de Radio María en todo el mundo “constituye una buena noticia para todos porque demuestra que, cuando se tiene la valentía de proponer contenidos de alto perfil a partir de una clara pertenencia cristiana, la iniciativa encuentra buena acogida además de las mejores previsiones, a veces también en aquellos que ojalá por primera vez tienen contacto con el mensaje evangélico”.
En su opinión esto no debe sorprender porque “María, la Madre de Dios y Madre nuestra, bajo cuyo nombre y cuya protección está puesta vuestra Radio, sabe encontrar el modo para hacer, a partir de pequeños y humildes inicios, grandes obras”.
Francisco les invitó a “perseverar en el compromiso, que se ha convertido en una verdadera misión, con fidelidad al Evangelio y al Magisterio de la Iglesia, de la escucha de la sociedad y de las personas, especialmente de los más pobres y marginados, para dar a todos los oyentes un punto de referencia y una ayuda”.
“Difundiendo el Evangelio y la devoción a la Madre de Jesús, promoviendo el amor a la Iglesia y a la oración, se ofrece un ‘canal’ válido para escuchar preciosas reflexiones, para aprender a rezar, para profundizar en contenidos de la fe que edifican y amplían los horizontes”.
“Es necesario amar con el corazón de María para vivir y sentir en sintonía con la Iglesia. Por eso les invito a cultivar siempre el ‘jardín interior’ de la oración, de la escucha de la Palabra de Dios, y de aprovechar buenas lecturas profundizando en la fe”. Es decir, “haciendo ustedes mismos lo que proponen a los otros con los programas”.
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— ACI Prensa (@aciprensa) septiembre 29, 2015
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