La Iglesia contará este sábado con 18 nuevos beatos

Se trata de un grupo de religiosos cistercienses que fueron martirizados durante la persecución religiosa del siglo XX en España

Madrid, 01 de octubre de 2015 (ZENIT.org) Redacción | 0 hits

“Es uno de los acontecimientos más extraordinarios que ha vivido la historia de la Diócesis de Santander”. Así ha calificado el obispo cántabro, Mons. Manuel Sánchez Monje, la beatificación de 18 mártires cistercienses durante una misa que presidirá el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Amato, y que se oficiará este sábado, a las 12 horas, en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción.

De los futuros beatos, 16 pertenecen al monasterio de Santa María de Viaceli de Cóbreces y otras dos monjas más al monasterio valenciano de Fons Salutis de la localidad de Algemesí, todos ellos mártires de la persecución religiosa del siglo XX en España, informó el Obispado en una nota. En su mayoría murieron víctimas del odio a la fe en la bahía de Santander en el año 1936, indicó.

Se trata de Pío Heredia (Álava), Amadeo García (León), Valeriano Rodríguez (León), Álvaro González (León), Antonio Delgado (Burgos), Eustaquio García (Palencia), Ángel de la Vega (León), Ezequiel Álvaro de la Fuente (Palencia), Eulogio Álvarez (León), Bienvenido Mata (Burgos), Marcelino Martín (Palencia), Leandro Gómez (Burgos), Eugenio García (Burgos), Vicente Pastor (Valencia), José Camí (Lérida), Micaela Baldoví (Valencia) y Natividad Medes (Valencia).

El monje cisterciense Francisco Rafael Pascual Rubio ha sido el encargado de llevar a cabo el proceso de beatificación, causa que comenzó en 1964. Para el postulador, estos mártires “eran unos sencillos monjes trabajadores del campo y de la quesería del monasterio y que nunca se inmiscuyeron en actividades políticas”. Por ello, calificó de injustas las muertes violentas de estos religiosos que murieron sin odio y perdonando a sus agresores.

Por su parte, Mons. Sánchez dijo a los medios informativos que estos nuevos mártires “enriquecen el patrimonio espiritual de la Iglesia y de la humanidad” porque arriesgaron su vida por no traicionar su conciencia. Así, el acto de la beatificación se convierte en “una llamada a todos a ser consecuentes con la fe”, a llevar una vida coherente con sus verdades y a ser fieles “a nuestra conciencia” en una sociedad “relativista donde todo da igual”, destacó el prelado.

Esta será la primera vez que la Diócesis de Santander acoja una ceremonia de beatificación a la que asistirán, entre otros, el nuncio Renzo Fratini y los obispos de Santander, Mons. Manuel Sánchez; de Oviedo, Mons. Jesús Sanz, acompañado por su auxiliar, Mons. Juan Antonio Menéndez; de León, Mons. Julián López; de Astorga, Mons. Camilo Lorenzo; de Victoria, Mons. Miguel Asurmendi; el obispo auxiliar de Madrid, Mons. Juan Antonio Martínez Camino, y el administrador diocesano de Palencia, D. Antonio Gómez.

Por otro lado, la abadía de Santa María de Viaceli celebrará el 9 de octubre, a las 18.30 horas, unas Vísperas solemnes para la veneración de las reliquias de los mártires y la colocación de la urna en el templo del monasterio.

La misma iglesia de Cóbreces acogerá el 10 de octubre, a las 12 horas, una solemne Eucaristía de acción de gracias por la beatificación de los monjes y las monjas mártires que estará presidida por el obispo de Santander, Mons. Sánchez Monge.