Zamboanga – “Se trata de un paso muy positivo. Demuestra la sinceridad del Moro Islamic Liberation Front en la búsqueda de la paz”: con estas palabras, el p. Angel Calvo, misionero claretiano, que vive desde hace años en Mindanao, y que actualmente reside en la ciudad de Zamboanga, al extremo Sur de las Filipinas, juzga la declaración pública del movimiento islámico que ha decidido colaborar activamente con el gobierno para detener la difusión del Estado islámico en las Filipinas del Sur.
En las Filipinas del Sur, donde existe una consistente comunidad musulmana, el ISIS está tratando de reclutar nuevos combatientes y contaminar a los grupos locales.
“Hoy el ISIS es el brand que funciona. Los grupos radicales locales pequeños encuentran simpatía con la ideología del ISIS, aunque no se ve una situación que sea alarmante, ya que se trata de pequeños episodios aislados” explica a la Agencia Fides el p. Calvo. “La posición que han tomado las formaciones que históricamente representan al islam filipino, como el MILF, y por muchos líderes religiosos islámicos, deja claro que la comunidad musulmana en las Filipinas del Sur rechaza el envenenamiento que el ISIS trata de realizar”.
“El MILF está comprometido firmemente en el proceso de paz. Es un proceso largo y fatigoso, y hay que tener paciencia. Tras el acuerdo firmado con el gobierno de Benigno Aquino, el Parlamento actual no lo ha ratificado. La cuestión ha sido re-enviada al nuevo gobierno que tomará posesión del cargo tras las elecciones del mayo del 2016” concluye el misionero.
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