Bajo el lema ¨Madre, enséñanos a construir la paz¨, los peregrinos, en su mayoría jóvenes, caminaron casi 60 kilómetros desde el santuario de San Cayetano en Liniers hacia la Basílica de Luján, con la imagen de la Patrona de Argentina a la cabeza.
Según informa AICA, fueron cientos de miles los que participaron de esta peregrinación, en la que por razones climáticas se tuvo que cambiar el lugar de celebración de la Misa hacia el interior de la basílica, en lugar de la Plaza Belgrano como estaba previsto.
En la Eucaristía, el Arzobispo de Buenos Aires y Primado de Argentina, Cardenal Mario Poli, alentó a los fieles a “renunciar a todo gesto de violencia, de discriminación, de intolerancia”
“No hay división en la peregrinación, es la unidad que queremos para nuestra patria”, sostuvo el Cardenal Poli, quien agregó que “si hay paz todo se puede construir, y qué necesidad tenemos los argentinos de paz”.
Insistió en pedirle a la Virgen de Luján, Patrona de Argentina, esa paz para que pueda vivirse “en las familias, en nuestros trabajos, en nuestras oficinas, en nuestras escuelas, en nuestras universidades”.
“Especialmente, Madre, vos que llevás la bandera argentina, la necesitamos (la paz) en nuestra Patria. Danos un corazón pacífico y el coraje de vivir en paz”, pidió el Arzobispo de Buenos Aires.
Al término de la Eucaristía, el Cardenal Poli bendijo y entronizó en el santuario una imagen del santo Cura Brochero llevada por un grupo de jóvenes que participan de un taller de capacitación en la parroquia de la Villa 21 del barrio porteño de Barracas.
Los peregrinos contaron con más de 60 puestos de apoyo y asistencia sanitaria entre Liniers y Luján. Participaron más de 5 mil voluntarios de parroquias, organizaciones sociales y la Cruz Roja Argentina.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 10 de noviembre de 2016
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