Domingo, 16 de marzo de 2014 | P. Eduardo Lozano
Ángelus Dominical
P. Eduardo Lozano
SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA y es momento de aprovechar los recursos que ofrecen las parroquias para una renovación personal y comunitaria: me gustaría anunciar la semana de ejercicios espirituales en tu rumbo, o el rezo del viacrucis en el templo cercano a tu domicilio; si acaso cuentas con servicio de internet, ahí mismo se ofrecen cursos y retiros on line, tal vez podrás desempolvar algún libro que seguramente está añejándose en tu armario y será de utilidad para vivir la cuaresma… EL KILO DE LIMÓN se puso sus moños: seguramente ha de ir a alguna fiesta o por lo menos paseará con presunción, como si por costar más aumentara su valor; lo que creció fue su precio porque eso de ser limón, sí que lo sigue siendo aunque haya encarecido; ya veré que a los políticos se les ocurre una reforma limonaria y veremos si no se le quita lo presumido… QUIEN DEBE AUMENTAR SU VALOR es cada bautizado y eso lo lograremos bajándonos el precio, es decir, sin que tengamos que esperar tantas monedas o billetes para cumplir mejor nuestra misión… HACE DOS PARES DE DÍAS estuve platicando con un par de jubilados: trabajaron por más de 30 años en una empresa -cumplir un horario, tener una responsabilidad, ejecutar tales habilidades, lograr tal eficacia, etc.- ahora gozan colaborando de cerca en actividades parroquiales y no precisamente catequéticas o evangelizadoras: han asumido como tarea la renovación y mantenimiento de espacios que ocupan los feligreses y entonces pintan el templo, arreglan las bancas, tienen a punto el salón parroquial y cuidan el pedacito de jardín; ya jubilados les dije que también tendrían que estar jubilosos de servir por el puro gusto de servir, o sea, que ahora valen más porque cuestan menos… MUCHA PENA Y TRISTEZA me causa lo del avión desaparecido allá en las lejanías asiáticas: eso de que se los tragó el mar de plano que causa dolor, pero tengo más cercano e inmediato el malestar y la angustia de los que pierden su trabajo o son víctimas de secuestro, explotación o cualquier otra bajeza humana, y la pregunta viene rápida: ¿qué hacer?... LO PEOR QUE UNO HACE ante el problema o dificultad es huir o ignorar; y ya veo a cuántos de nosotros que con desfachatez nos justificamos diciendo: mejor no voy, mejor no le digo nada, mejor me quedo callado, mejor me bajo y ya, mejor ni le pregunto ¡¿qué tal si se enoja?!... EN REALIDAD, LA PALABRA “mejor” debería ser substituida -en muchos de esos casos- por la palabra “peor” y entonces nos daríamos cuenta que andamos huyendo, que le sacamos la vuelta al problema; si dijéramos: peor si no voy, peor si no le digo nada, peor si me quedo callado, peor si me bajo y me largo, peor si no le pregunto nada… LA SEMANA PASADA ME PIDIERON que fuera a confesar y ungir a un enfermo en el hospital casi a la medianoche; ya conozco la rutina de un hospital y como sacerdotes ordinariamente nos permiten el acceso a cualquier hora, pero dio la casualidad que el guardia tomó el papel del kilo de limón (se puso sus moños) y después de cuarenta minutos no me daba el paso y ponía mil pretextos; fue entonces que ya me estaba poniendo agrio (como cualquier limón que se respete) y busqué por otra puerta -del mismo hospital- alguna ventanilla o escritorio donde quejarme o reclamar… LOS SACERDOTES O MINISTROS que asistimos a enfermos y moribundos en hospitales no vamos ciertamente como visita familiar ni para estar estorbando: vamos a dar un servicio que ni el médico ni la enfermera ni nadie más puede ofrecer en una situación tal; no te hago la historia larga y concluyo diciéndote que luego de un suave forcejeo verbal con el responsable de la otra puerta, me dio el ingreso sin que se lo pidiera y pude atender al enfermo, o sea, peor si no digo nada, peor si me voy, peor si no pregunto, peor si no le hubiera agradecido al susodicho guardia cuando salí luego de haber cumplido mi tarea… DOS INVITACIONES: ya anuncié que el martes 18 visitaremos la exposición sobre los mayas en el Palacio Nacional, la cita es a las 10 en punto en la puerta de la Parroquia del Sagrario Metropolitano; la segunda invitación es para que asistas al monólogo que se está presentando en Templo de Jesús Nazareno durante los sábados de marzo (nos quedan el 22 y el 29) a las 18 hrs.; el tema es José María Morelos y Pavón; ¿y dónde está el Templo de Jesús Nazareno?, pues en República de El Salvador 119, Centro Histórico, en el mismo sitio donde hace 325 años se colocó la imagen del auténtico y original Ángel de la Ciudad de México: San Miguel, cuya historia relataré un día de estos que no tenga otra cosa qué hacer (tal vez la próxima semana)… ¿Y LA FIESTA DE LA GRATITUD?, claro que sigue adelante; entérate de los detalles en otras páginas de este semanario…

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