El Pontífice continúa así con su costumbre de visitar parroquias y comunidades de la Diócesis de Roma, de la que el Papa es titular, sobre todo aquellas que se encuentran en la periferia o que viven en situación de precariedad.
Renovada y consolidada la iglesia después de estos tres años de obras que han solventado el problema de corrimiento de tierras que puso en peligro su estructura, el Papa presidirá la Misa de dedicación del altar.
El Pontífice llegará a la parroquia a las 15:45 y lo acogerán el Vicario de la Diócesis de Roma, Cardenal Angelo De Donatis, el Obispo Auxiliar del Sector Oeste, Mons. Paolo Selvadagi, el párroco P. Dario Frattini y el Superior General de Canónigos Regulares del Inmaculado Corazón, Rinaldo Guarisco.
Antes de la Misa, el Papa se encontrará con varios grupos que forman parte de la comunidad parroquial. Primero visitará a los enfermos en una sala de la planta baja del edificio parroquial. Después, en el piso superior, conversará con los que han contribuido a la realización del pesebre viviente en los últimos dos años para recaudar fondos para los trabajos de restauración del templo.
El Papa también se reunirá con recién casados y con todos los que participan en los cursos de preparación al matrimonio. También verá a los trabajadores y voluntarios de Cáritas parroquial, entre ellos a los que participan en los planes de emergencia para rescatar a personas sin techo durante las olas de frío en invierno.
Asimismo, se encontrará con los responsables de la reconstrucción y consolidación del templo, así como con los grupos de catecismo, bautismo, comunión y crisma. En total, unas trescientas personas. Luego saludará a los sacerdotes y confesará a los fieles.
Finalmente, el Papa Francisco celebrará la Misa en la iglesia con el rito de dedicación del altar.
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