Durante una audiencia que concedió en el Vaticano este sábado 27 de abril a los presidente de la Unión de Provincias de Italia, el Santo Padre destacó el importante papel que juegan las provincias en la conservación y desarrollo del territorio.
El Papa recordó que “los ámbitos en que despliegan sus competencias, son principalmente los de las intervenciones en defensa del suelo y la consolidación de las áreas de riesgo, la de la viabilidad de una red vial generalizada que conecta los centros pequeños con las ciudades más grandes y la gestión de las escuelas secundarias superiores, garantizando su seguridad y funcionalidad”.
“Se trata de tareas que, incluso si se llevan a cabo en distintos sectores, tienen como objetivo final el mismo: garantizar que las condiciones ambientales del territorio, como las de las carreteras y las escuelas no se deterioren debido a la negligencia, a la falta del mantenimiento necesario, por indolencia en la adopción de las medidas indispensables para evitar la degradación ambiental o estructural y los peligros que ésta conlleva”, explicó.
Para cumplir esas tareas, señaló que se necesitan más medios destinados al cuidado del territorio y de los edificios e infraestructuras (escuelas, hospitales, carreteras) “para una mejora efectiva de la calidad de vida, para evitar posibles dramas y sus enormes costes humanos y económicos, consecuencia de la desidia o de la imprevisión, y para garantizar perspectivas de desarrollo sostenible”.
Es ahí donde las provincias, “por su larga historia, por la tendencia a la homogeneidad de sus respectivos territorios y por el perfil de las competencias de las que disponen, son particularmente responsables de todo esto”.
El Papa finalizó su discurso animando a los responsables de las provincias a avanzar en el objetivo “de un desarrollo verdaderamente sostenible”.
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