El Vaticano es tan pequeño que la Basílica de San Pedro representa el 7% del total de su extensión, y si añadimos la Plaza de San Pedro ocuparían el 20% de su territorio.
Su lengua oficial es el latín (único país del mundo que la tiene). Además, sus ciudadanos tienen una tasa de alfabetización del 100 %.
Su forma de gobierno es la monarquía absoluta, siendo el jefe del estado el Sumo Pontífice y tiene pleno poder legislativo, ejecutivo y judicial. Cuando la sede está vacante estos poderes pasan al colegio cardenalicio. El poder legislativo, aparte el papa, ejercen en su nombre, una Comisión compuesta por un cardenal Presidente y otros cardenales nombrados por un período de cinco años. El poder ejecutivo es delegado en el Presidente de la Comisión de que lleva el nombre del presidente de la Gobernación y está asistida por el Secretario General y el Secretario General Adjunto. El poder judicial es ejercido, en nombre del Sumo Pontífice, por los órganos constituidos de acuerdo con el sistema judicial del Estado.
La economía del Vaticano se basa en la inversión de muebles e inmuebles, de los activos existentes, en los ingresos, las remesas de diócesis de todo el mundo, en los ingresos procedentes del IOR (Instituto para las Obras Religiosas), y las donaciones de los fieles, el óbolo de San Pedro. Y desde el 1998 tiene la autorización de la Unión Europea para emitir 670.000 euros al año.
Quien provee a la seguridad del Papa y del estado es el cuerpo de la Guardia Suiza, que asumió la defensa del Papa oficialmente en 1506 y fue 21 años después cuando tuvieron su primer acción importante de defensa, el 6 de mayo de 1527, cuando fuerzas españolas atacaron al Papa Clemente VII. Unos 147 guardias de los 189 que estaban en servicio murieron ese día protegiendo al sumo pontífice, quien pudo escapar al Castillo Sant’Angelo para refugiarse. Se dice según la tradición que su vestimenta tan colorida y particular fue diseñada por el mismísimo Miguel Ángel. También son encargados de la seguridad el cuerpo de Gendarmería y la policía de estado.
En 1984, la Ciudad del Vaticano fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es el hogar, de edificios, obras de arte y volúmenes antiguos que representan el punto más alto del poder cultural del papado y de las obras más sublimes del ingenio humano, como la maravillosa Capilla Sixtina.
En este minúsculo estado, también podemos encontrar lo que generalmente vemos en cualquier otro: aparte algunos edificios habitados generalmente por personas que trabajan allí, está: la Gobernación o Casa de Gobierno, la estación de trenes, un pequeño centro comercial, la farmacia, colegios de estudios, biblioteca, librería, casa editora, periódico, museos, centro televisivo, radio, servicio telefónico, hospital, helipuerto y un hermoso jardín con tantas lindas anécdotas de los papas que merece le dediquemos un artículo separadamente.
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