De igual manera que existe un Índice de Precios al Consumo, en 1983 se construyó a modo humorístico el índice de Precios de la Navidad (IPN). Todo índice de precios al consumo recoge de forma agregada los precios de una cesta de bienes de forma que en el tiempo pueda compararse. Sirve de esa manera como resumen de los precios y permite observar de forma objetiva la evolución de los mismos. No obstante, este IPN se corresponde con una cesta de bienes bastante especial.
Recoge los precios de los artículos de un popular villancico navideño de origen anglosajón llamado The Twelve Days of Christmas que desglosa el siguiente listado de productos y servicios: una perdiz en un peral, dos tórtolas, tres gallinas, cuatro aves cantoras, cinco anillos de oro, seis gansos, siete cisnes, ocho sirvientas, nueve bailarinas, diez “señores saltarines”, once gaiteros y doce tamborileros. De cara a considerar los precios se toman los de referencia entre los doce días que median entre el 26 de diciembre y el 6 de enero.
De esta manera para hacer el cálculo de los artículos de la cesta del IPN “índice de precios de Navidad” se calcula como la suma de los precios de estos bienes por el número de artículos o servicios.
Para ello se toma los siguientes precios: El precio del peral se obtiene de la cotización de un vivero local de Philadelphia; El precio de la perdiz, de las tórtolas y o de las gallinas francesas son las que marca el Jardín botánico y zoo de Cincinnati; Se utiliza el precio del canario doméstico según la cotización de Petco como precio del “ave cantora”; La cotización de los anillos de oro se establece según Gordon Jewelers; el precio de los sirvientes se obtiene considerando el salario mínimo federal en Estados Unidos mientras que el precio del servicio de danza de las bailarinas proviene de la estimación de The Philadelphia Dance Company, éste también se utiliza para el precio de los señores saltarines; el salario de tamborileros y gaiteros se obtiene del salario diario de un músico según el Sindicato de Música de Pensilvania.
Si bien el ÍPN surgió como un índice en clave de humor su tendencia ha mostrado un comportamiento consistente con otros índices de consumo de Estados Unidos. En el IPN por ejemplo se detecta cómo a lo largo de los 36 años del índice la irrupción de internet y del comercio electrónico ha facilitado encontrar los regalos que hace mención el villancico.
Otro elemento que se puede detectar es que el precio de los servicios ha ido aumentando mientras que el de los bienes se ha ido decelerando. La volatilidad del precio del petróleo ha influido en el IPN en relación a los costes de envío de los bienes de la canción. Por otra parte, la caída del precio del oro en 1994 así como el de algunas aves se reflejan en la evolución del IPN. La estabilización del IPN en los últimos cinco años estaría relacionada con la estabilización de los precios en al economía americana en al recuperación tras la última crisis.
El caso del IPN este no es el único como índice de tipo humorístico pero que se muestra consistente con la evolución económica de un país o que revelan información potencialmente interesante. Por ejemplo, el Índice Big Mac que estima The Economist computa el precio de una hamburguesa Big Mac en diferentes países. En tanto que trata sobre el mismo bien, el índice Big Mac es un buen proxy que se utiliza para la comparación del poder adquisitivo entre economías.
Sea como sea, los economistas no pueden evitar encontrar inspiración hasta en una canción de Navidad para hacer sus cálculos de cuánto cuestan los bienes y servicios aunque sea para celebrar la Navidad. Feliz Navidad.
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