Y si la medianoche te agarra con dinero en el bolsillo, será indicio de que la prosperidad te acompañará todo el año que sigue.
En otros países de América Latina también se realiza este ritual; en países como Colombia, México, Perú o Bolivia también se ve a los vecinos por la calle arrastrando maletas en Nochevieja. Apenas la gente se come las 12 uvas, comienza la carrera por salir a “caminar la maleta”.
“Para que este ritual surja efecto tienes que ir a la calle a pasear con tu maleta, y es aquí donde existen diferentes versiones. Hay en algunos países donde al salir por la puerta de casa con tu maleta para pasearla durante la Nochevieja tienes que dar un portazo, para que a la misma vez de atraer el viaje estamos espantando a los malos espíritus y a los malos rollos que nos han perseguido durante el año anterior”, explica Inmaculada Jiménez Peral en su blog.
Lo que hay detrás de todas estas costumbres y “ceremonias” es la asentada creencia en que ellas ayudarán a conseguir lo que todo el mundo anhela: que el año siguiente sea mejor.
Cada quien pide beneficios particulares y específicos según sus necesidades o expectativas. Son supersticiones, pero divierten y apuntalan las esperanzas por los venideros y prósperos 365 días.
Hay gente que simplemente sale y camina; otros corren; lo importante es volar a la habitación más cercana y sacar la maleta apenas den las 12 para caminar la calle, generalmente dando la vuelta a la cuadra.
Hay personas que sólo se encaraman en una silla con la maleta como símbolo de que pondrán tierra de por medio “despegados del piso”, es decir, viajando en avión.
Hay familias enteras que salen con su maleta a recorrer las calles. Es muy cómico ver a la gente saliendo en volandillas con los maletones al lomo y muchos aseguran que les funciona.
Te puede interesar: Amuletos de Año Nuevo, ¿que traen en realidad?
Esta vez, seguro que habrá quienes lo intenten para producir el reencuentro, dado que casi no hay familias que no tengan varios de sus miembros fuera del país, diseminados en una diáspora que se lleva miles por día al extranjero.
Lo que no sabemos es si el asunto opera al contrario: si sacando las maletas haremos que nuestros familiares fuera regresen. Probablemente sea menester hacer muchas cosas alejadas del fetiche que produzcan un cambio de fondo en el país, las familias se reunifiquen y los venezolanos puedan reconciliarse.
Publicar un comentario