El activista gay Paul Ibarra presentó recientemente una denuncia administrativa contra Mons. Cabrero Romero ante la Secretaría de Gobernación, órgano del Gobierno de México, porque el Arzobispo de San Luis Potosí defendió el 16 de mayo que la institución del matrimonio está conformada por un hombre y una mujer.
Para Ibarra, el mensaje del Prelado, realizado el mismo día en el que el Congreso de San Luis Potosí abría las puertas al mal llamado “matrimonio” gay, califica como “discurso de odio”.
Los firmantes de la campaña subrayaron que “en realidad, no hace falta ser católico ni creyente para defender que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. El matrimonio fue matrimonio muchos siglos antes de que apareciera la Iglesia”. “Y lo seguirá siendo”, añadieron.
Con la denuncia contra el Arzobispo mexicano, advirtieron, “está en juego la libertad de expresión y la libertad religiosa”.
“El obispo no pidió desacatar. Pidió respeto para quienes defendemos lo que ha sido la base de la sociedad y la civilización desde que el hombre es hombre”, señalaron.
“¿Se puede tachar de ‘discurso de odio’ a quien manifiesta con respeto una verdad milenaria y un contenido de su moral?”, cuestionaron.
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