Aquí hay algunas cosas que los padres pueden hacer para ayudar a sus hijos a evitar o escapar con éxito de situaciones peligrosas.
1
Habla con ellos de la belleza de su cuerpoEsto debe comunicarse sin tabúes, con modestia, delicadeza y asombro. Es importante explicarle a su hijo: “No tienes un cuerpo, eres un cuerpo”.
En otras palabras, necesitan comprender la unidad entre el cuerpo y el alma; que son buenos y dignos en su propio ser, y que deben ser respetados en todos los aspectos de su persona.
2
Es tu cuerpo y nadie tiene derecho a tocarloEsta recomendación debe repetirse a menudo cuando un niño es pequeño, sabiendo que esto también se aplica a los besos y abrazos. Aunque las normas de cortesía pueden requerir que un niño diga “hola” o “gracias”, nunca se debe obligar a un niño a besar o abrazar a nadie, aunque sea un pariente.
3
Enséñales a reconocer y poner nombre a sus emocionesConforme los niños estén más conectados con lo que sienten, más sabrán cómo escuchar lo que está sucediendo dentro de ellos y más probabilidades tendrán de detectar a una persona peligrosa en su entorno a través del “sentimiento” negativo que experimentan. Para alejarse, su hijo debe saber que puede decir “no” y obtener ayuda.
4
Enseña un lema anti abuso en casa“Di no. Huye. Cuéntale a alguien lo que pasa”. Este lema es simple y efectivo, y los niños incluso deberían memorizarlo. Les permite, en caso de una situación límite, ponerlo en práctica sin la necesidad de pensar.
5
Enséñales un plan de seguridad¿Dónde y a quién debe acudir su hijo en caso de problemas? Discute el tema con ellos para ayudarles a encontrar la solución adecuada. Para los niños mayores, idea un “plan de seguridad”. Deben tener contactos a los que puedan recurrir para obtener ayuda de manera fácil y rápida.
6
Enfatiza la importancia del lenguaje corporalAyuda a la autoconfianza de su hijo aprendiendo y practicando un lenguaje corporal seguro. Esto les permitirá transmitir una actitud de confianza, lo que puede ayudar a disuadir a algunos abusadores de elegirlos como objetivo. También deben ser conscientes del lenguaje corporal de otras personas y conocer los signos de cuándo deben mantenerse alejados de alguien.
7
Enséñales a defender sus límitesEl abuso sexual es un tipo de contacto físico no deseado. Si los niños pueden poner fin al contacto físico no sexual no deseado en cosas más pequeñas, aunque sea por una persona cercana o “confiable”, él o ella podrán defenderse más fácilmente contra el contacto físico sexual.
8
Practica regularmente juegos de rolesPractica, por ejemplo, decir un “no” fuerte y claro: con calma, firmeza, decisión y sin ofrecer justificación. Discutir con el agresor prolonga el contacto y le permite proporcionar posibles argumentos.
9
Construye un entorno de confianzaLos niños deben saber que pueden hablar, ser escuchados y, sobre todo, ser creídos. Incluso aunque los niños mientan o distorsionen la verdad en ocasiones sobre algunos temas, es esencial crear un clima de confianza para que se sientan cómodos al hablar de sus problemas. Los adultos deben tomar muy en serio las quejas de los niños sobre estos asuntos y tomar medidas para discernir, investigar y hacer un seguimiento adecuado.
10
Sé cautelosoAlgunos adultos pueden preocuparnos, incluso cuando son parte de la familia, de nuestra iglesia, de la escuela o de un club deportivo. Si no estás seguro de una persona, no dudes en compartir tus inquietudes y/o alejar a tu hijo de esa persona.
Vigila a los adultos a los que confías tus hijos. Confía en tu intuición. Es mejor tomar demasiadas precauciones que no tomar las suficientes.
11
La tarjeta NOImprime una tarjeta de bolsillo para tus hijos con el número de teléfono de la policía y de la línea directa local de abuso infantil. Explícales para qué sirve y la seriedad del asunto: que los números no son algo para usar a la ligera, pero que tampoco deberían tener miedo de usarlos si se sienten amenazados.
12
Diles que no es su culpaLos niños necesitan saber que, no importa lo que otros les digan, de ninguna manera son responsables de que alguien intente o consiga abusar de ellos. Necesitan saber que pueden decir “no” en cualquier momento, en el momento en que reconocen que están en una mala situación, y que pueden denunciarlo libremente, sin vergüenza ni culpa.
13
Reza por tus hijosEstate atento a la seguridad de sus hijos en todo momento. Y si eres creyente, confíales a la protección divina y pídele a su ángel de la guarda que los cuide: “Santo Ángel de Dios, mantenga a mis hijos a salvo de todo peligro de cuerpo y alma”.
No podemos mantener a nuestros hijos a salvo de todos los peligros posibles, pero al tomar medidas como las que se enumeran aquí, podemos ayudarlos a estar más preparados para enfrentar algunos de los peligros que pueden encontrar.
Este artículo fue escrito con la ayuda de una madre de un niño maltratado, la Dra. Jaquet-Chiffelle, quien fue a su vez víctima de violación.
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