El arzobispo de Pamplona (España) compareció esta mañana en una rueda de prensa para pedir perdón a las víctimas de abusos del colegio de Nuestra Señora del Puy de Estella: “Hoy estoy aquí para pedir disculpas y perdón por esta tardanza”.
Monseñor Francisco Pérez reconoce la tardanza y consideró que : “los indicios de abusos físicos o de índole sexual debieron investigarse y alcanzarse conclusiones en su momento, sin que sea justificación el que fueran otros tiempos”.
Las víctimas denunciaron abusos físicos y sexuales en el colegio del Puy de Estella hace medio siglo y el arzobispo de Pamplona ha querido entonar el “mea culpa” de la diócesis en todo este proceso: «Mi corazón se duele y llora. Yo lo único que quiero es que esos corazones sanen y así se lo pido al Señor todos los días. Ahora vamos a atenderlos y pido perdón, pero también al mismo tiempo creo que aquí tenemos que ayudarnos entre todos”.
Por eso manifestó que «en nuestra voluntad está el hacerlo mejor que en el pasado». «Es un cambio importante en el que hemos tenido que asumir nuevos aprendizajes, nuevas formas de hacer y unas nuevas sensibilidades. No vamos a negar que quedan pasos a dar, pero puedo asegurar que estamos en el camino de darlos.
Por ello, además de pedir perdón y hacer suyo el “dolor” de las víctimas, el arzobispo de Pamplona ha ofrecido a las personas afectadas un encuentro privado para «escucharlas y trasladarles personalmente las disculpas y el resultado de la investigación seguida».
Conclusiones de la Comisión creada por la Archidiócesis
La archidiócesis de Pamplona ha presentado las conclusiones de la Comisión creada en la Archidiócesis para analizar estas y otras denuncias.
Sobre el Colegio Nuestra Señora del Puy de Estella se ha informado de la imposibilidad de establecer culpabilidades fuera del proceso penal por el fallecimiento del sacerdote presunto autor de los hechos.
El propio arzobispo de Pamplona, monseñor Francisco Perez ha reconocido que ante los periodistas que «si desafortunadamente no se puede llegar a establecer la culpabilidad desde un ámbito penal, sí podemos llegar a determinar la verosimilitud de las denuncias presentadas”.
Con rotundidad, claridad y determinación el arzobispo de Pamplona no ha dudado en pedir perdón: “Si existieron indicios de abusos físicos o de índole sexual debieron investigarse y alcanzarse conclusiones en su momento, sin que sea justificación el que fueran otros tiempos”. “Nos piden que pidamos perdón, y yo humildemente así lo hago».
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