El P. Juan Manuel Sierra López, de la Universidad de San Dámaso precisó que la devoción a los ángeles y arcángeles “pertenece a la fe de la iglesia que proviene del mundo bíblico, ya que en la Sagrada Escritura, tanto en el Antiguo, como el Nuevo Testamento, parece claramente afirmada la existencia de los ángeles, en sentido general”.
Además, “San Pablo distingue categorías de ángeles, entre principados, potestades dominaciones, ángeles y arcángeles. Y también es algo que ha entrado de lleno en la devoción popular y en la piedad de los fieles”.
El 29 de septiembre se conmemora a los Santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael, y el 2 de octubre es la festividad de los Santos Ángeles Custodios. Dos fiestas que el P. Sierra atribuye a que “en la iglesia la liturgia ha celebrado desde antiguo a los ángeles y arcángeles y ésto forma parte del Credo cuando decimos que Dios ha creado lo visible y lo invisible, y en esto se introduce los ángeles en sentido general”.
“San Gregorio Magno explica que el nombre de los ángeles es por la misión que desempeñan. Y los arcángeles, Miguel, Gabriel y Rafael tienen una misión que aparece en la Biblia y en el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento. La iglesia ha agrupado la celebración litúrgica de los santos arcángeles y la de los ángeles custodios que nos acompañan a cada uno de nosotros”, explicó.
También subrayó que la aportación de los ángeles y arcángeles a nuestra vida de fe es importante porque “nos recuerdan esa solidaridad que existe entre ángeles y hombres en esa respuesta a Dios y en el camino de salvación”.
Y recordó la importancia de contar con “su ayuda e intercesión”, por eso animó a “invocar y rezar al ángel de la guarda para que nos ayude, y a San Miguel como defensor de la iglesia en sus peligros y adversidades”.
Publicar un comentario