Fieles y vecinos lo hicieron formando un muro de protección alrededor de la Basílica María Auxiliadora de La Paz. ¿Y cuál fue el arma defensiva que predominó? La oración y no ser indiferentes
Es una imagen lastimosa, pero recurrente en los últimos años. Grupos a favor del aborto que agreden de manera constante iglesias y símbolos cristianos. Agresiones que van desde insultos, blasfemias y hasta ataques materiales o físicos.
Países latinoamericanos como México, Argentina y Chile –por citar solo algunos ejemplos- tienen un largo historial con respecto a estos hechos y daños a catedrales. Por lo general todo esto está asociado a marchas o manifestaciones concretas de grupos feministas y a favor del aborto legal.
La custodia de una basílica
Este 28 de septiembre, un grupo de vecinos y fieles laicos se enteraron de la protesta de parte de un grupo pro aborto en una zona de La Paz en las cercanías de la Basílica de María Auxiliadora. Según informóIglesia Viva, este sitio ya había sido testigo de ataques.
Según prosigue el relato, conociendo los antecedentes, “fieles católicos laicos, religiosas, el párroco e incluso Iglesias evangélicas y personas que salían del trabajo, conformaron un muro de protección a la basílica”.
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La encargada de contar acerca de la decisión y cómo transcurrió todo fue Jesse Mercado, integrante del Apostolado de la Nueva Evangelización en Bolivia y uno de los defensores de la basílica.
Fue alrededor de las 19.15 horas cuando los manifestantes se agruparon frente a la basílica con el clásico “modus operandi” de insultos y blasfemias. Debido a que estaba vez no pudieron acceder al atrio lo que hicieron estos manifestantes fue derramar pintura también sobre algunos de los presentes.
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“Ante este atropello lo defensores del templo previamente se habían fortalecido con el rezo del Rosario, agua bendita, carteles pro vida y otros elementos que impedían el ingreso de los protestantes”, agrega la crónica de Iglesia Viva.
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Estar presentes y rezar
Lo que hizo este grupo de personas, en definitiva, fue defender la Iglesia durante la velada de agresiones. Pero además de reflexionar sobre la tendencia de los últimos años con respecto a la despenalización del aborto en varios países de América Latina, lo que propuso Jesse fue de alguna manera un llamado a la defensa de la vida, de los sagrarios y los altares de las iglesias.
¿Con qué armas se defendió la basílica? Según contó Jesse, con la presencia en el lugar pidiendo rezar por la gente que protesta y por los niños inocentes que son abortados.
“Rezar por ellos, por nuestros enemigos, rezar por su conversión, rezar por todos los niños inocentes que han sido y siguen siendo abortados por caprichos de una sociedad irracional y despertemos, estemos más atentos en este tema”, finalizó.
En definitiva, no siendo indiferentes ante estas cuestiones.
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