El Papa aprueba normas anti-corrupción en las causas de los santos

Las causas serán seguidas por postuladores con una formación que respeten el rigor moral y tengan sensibilidad evangélica

El Vaticano lucha contra la corrupción en todos los ámbitos, también en el proceso para declarar a un santo. El nuevo reglamento prevé la posesión de un diploma específico, un límite de casos a perseguir conjuntamente, la recepción de una compensación justa por el trabajo realizado y la obligación de guardar el secreto sobre el propio caso por cincuenta años. 

Una herramienta para que los postuladores puedan realizar siempre su servicio con esa «marcada sensibilidad evangélica» y ese «rigor moral» que desea el Papa Francisco en el discurso que les dirigió en la audiencia del 12 de diciembre de 2019, destacó el Prefecto del Dicasterio encargado.

Se trata del nuevo «Reglamento de Postuladores», autorizado por el Papa Francisco el 30 de agosto, y firmado el 11 de octubre por el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Marcello Semeraro, y por el secretario arzobispo Fabio Fabene.

Por primera vez se ha promulgado un documento normativo sobre la figura y las funciones del postulador de las causas de beatificación y canonización. Lo cuenta el cardenal Semeraro, en una entrevista con los medios vaticanos (14.10.2021).  

Puntos claves

Las Reglas explican detalladamente los deberes y responsabilidades del postulador en las investigaciones sobre el martirio, las virtudes heroicas, la ofrenda de la vida y el culto antiguo, tanto en la fase diocesana como en la romana. Y las relativas al reconocimiento de un posible milagro y a las ceremonias de beatificación y canonización. 

“Creo que el postulador ideal es el que asume y realiza el cargo que se le confiere como un servicio: no un servicio cualquiera, sino un servicio prestado en la Iglesia y para el bien de la Iglesia, para el bien de los fieles». 

El Papa Francisco, en su discurso a la Congregación del 12 de diciembre de 2019, hablando de los postuladores, subrayó que deben cultivar en ellos la conciencia de que las causas que tratan son «realidades de carácter espiritual; no sólo procesal», indicó el cardenal Marcello Semeraro.

Se trata del Reglamento para los postuladores, que entró en vigor el pasado 11 de octubre, en el aniversario del inicio del Concilio Vaticano II. 

Formación 

En particular, se recuerda que el cargo de postulador puede ser desempeñado por «cualquier fiel católico de probada integridad, que tenga un conocimiento adecuado de la teología, el derecho canónico y la historia, así como de la práctica del dicasterio». 

El postulador entonces en la «fase romana» de la causa y «posiblemente» también en la fase diocesana debe tener un diploma de la Escuela de Formación Avanzada en las Causas de los Santos. En este sentido, la Pontificia Universidad Lateranense en Roma ha preparado una propuesta formativa dirigida a los futuros candidatos a postuladores.

El Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos subrayó dos puntos claves de la reglamentación: “Un límite de treinta causas activas en la fase romana y la exclusión de cardenales, obispos y funcionarios de la Congregación para las Causas de los Santos de la posibilidad de actuar como postulador.” 

Cada postulador, entonces, dejará todas las causas al cumplir los ochenta años de edad. Además, salvo los postuladores generales de los institutos religiosos, a todos los demás no se les puede confiar más de treinta causas, como dicho antes.  

Remuneración

El postulante tiene entonces derecho a «una remuneración justa y proporcionada al trabajo efectivamente realizado», pero «no debe exigir ni recibir un salario vinculado a su nombramiento para cada caso concreto», y en todo caso puede trabajar «también gratuitamente». 

Además, «no podrá actuar como administrador de los bienes de la Causa». Los postuladores, al igual que los diputados que pueden nombrar con la aprobación del demandante en la causa, «no son empleados de la Santa Sede» y «no pueden beneficiarse del régimen fiscal del artículo 17 del Tratado de Letrán». 

Entretanto, se recuerda a los postuladores que la investigación y la Positio sobre el martirio, las virtudes heroicas, la ofrenda de la vida, el culto antiguo y los posibles milagros «permanecen sub-secretos hasta cincuenta años después del final de la propia investigación». 

Posteriormente, «cualquier consulta puede ser permitida por quien tiene la custodia, teniendo en cuenta la legislación vigente sobre privacidad”.

Transparencia 

Cabe recordar que en el año 2017, el Papa había aprobado nuevas normas sobre las reliquias en la iglesia: autenticidad y conservación. 

En esta línea, ha seguido la operación ‘transparencia de las causas, para que se terminen los gastos excesivos y la falta de control de los recursos. 

El Papa había querido que todo el dinero utilizado en la investigación de una causa de santidad fuera rastreado, con pagos a través de transferencia bancaria y nada quedara fuera de los canales oficiales y se liberara al postulador de manejar dinero de la causa. Para ello, la institución de la figura de un administrador oficial que vigilara cada etapa.

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