El diplomado comenzará el 25 de marzo y apunta como estudiantes a “personas que buscan realizar un discernimiento crítico de la realidad, y repensar la fe en contexto feminista”.
Entre sus objetivos, explica la universidad jesuita, figura “capacitar a las y los participantes para responder a los desafíos que presenta la realidad contemporánea al quehacer teológico feminista”.
El temario incluye cursos como “El movimiento LGBTTTI. Textos clásicos del enfoque de género”, “Sensualidad y placer, voces de las mujeres desde la poesía hebrea”, “Textos del Nuevo Testamento en autoras feministas”, “Cristología Feminista: Jesús la Sophia encarnada” y “La inclusión de la perspectiva feminista y la mujer en la Iglesia y la eclesiología”.
ACI Prensa intentó repetidamente contactar a la IBERO respecto a su curso, pero al cierre de esta edición no ha obtenido respuesta.
El diplomado de “Enfoque feminista de la teología cristiana” se suma a otros cursos controversiales de la universidad jesuita, como “Defensa y promoción de los Derechos Humanos de la comunidad LGBT+”.
Recientemente el Papa Francisco criticó la corriente de pensamiento feminista y advirtió que “cualquier feminismo termina siendo un machismo con falda”.
El Santo Padre dijo que “no se trata de dar más funciones a la mujer en la Iglesia –si bien es bueno, pero así no se resuelve el problema– se trata de integrar a la mujer como figura de la Iglesia en nuestro pensamiento. Es pensar también la Iglesia con las categorías de una mujer”.
La Iglesia, subrayó el Papa, “es mujer, esposa y madre”.
Las polémicas de la IBERO
La IBERO se ha visto frecuentemente en el centro de la controversia, debido a su apoyo a la agenda gay en México.
En abril de 2018, la IBERO acogió por quinto año consecutivo la “semana de la diversidad humana”, evento que incluyó presentaciones como “free the nipple” (“libera el pezón”) y “El inicio del imperio gay”.
En esa ocasión, Carlos Valle, director de Comunicaciones de la IBERO en Ciudad de México, defendió la realización de la “semana de la diversidad humana”, porque “uno de los valores fundantes de esta universidad es la inclusión”.
Un año antes, en junio de 2017, el rector de la IBERO, el sacerdote jesuita David Fernández Dávalos, defendió la agenda gay en México y aseguró que no legalizar el mal llamado “matrimonio” gay en todo el país deja “desprotegidas” a las parejas homosexuales.
Publicar un comentario