Durante el rezo del Ángelus este domingo 15 de agosto, que presidió desde el Palacio Apostólico del Vaticano, el Pontífice también tuvo unas palabras especiales para aquellos que, por diferentes motivos, no pueden salir de vacaciones.
“Deseo dirigir un pensamiento a cuantos pasan estos días de Ferragosto en varios lugares de descanso: Les deseo serenidad y paz. Sin embargo, no puedo olvidar a aquellos que no pueden ir de vacaciones, aquellos que permanecen al servicio de la comunidad y también a aquellos que se encuentran en condiciones desfavorables, agravadas por el fuerte calor y por el cierre por vacaciones de algunos servicios”, dijo el Santo Padre.
“Pienso especialmente en los enfermos, los ancianos, los encarcelados, los desempleados, los refugiados y todas las personas solas o en dificultad. Que María extienda a cada uno de ellos su materna protección”, concluyó.
La fiesta del Ferragosto a la que hizo referencia el Pontífice es una festividad propia del calendario laboral italiano que coincide siempre el 15 de agosto, Solemnidad de la Asunción de María, y que muchos italianos aprovechan para dar comienzo a sus vacaciones.
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