Así lo dijo el Santo Padre este domingo 11 de septiembre después de dirigir el rezo del Ángelus ante miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro del Vaticano.
“En este momento de oración, recuerdo a la hermana Maria de Coppi, misionera comboniana, asesinada en Chipene, Mozambique, donde sirvió con amor durante casi sesenta años. Que su testimonio dé fuerza y valentía a los cristianos y a todo el pueblo de Mozambique”, afirmó el Papa Francisco.
La hermana Maria de Coppi de 84 años fue asesinada el pasado 6 de septiembre en un atentado terrorista en Chipene, Mozambique.
Por su parte, el presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), el Cardenal Matteo Zuppi, expresó su profundo pésame en nombre de todos los obispos italianos y rezó por la “paz y reconciliación” en este país.
“Lloramos a otra hermana que con sencillez, dedicación y en silencio ofreció su vida por amor al Evangelio”, dijo el Purpurado tras recordar a la hermana Luisa Dell'Orto, asesinada el 25 de junio en Haití.
Además, el Cardenal Zuppi rezó para “que su sacrificio sea una semilla de paz y reconciliación en una tierra que, tras años de estabilidad, vuelve a ser azotada por la violencia, provocada por grupos islamistas que llevan años sembrando el terror y la muerte en amplias zonas del norte del país”.
“Mi pensamiento, en nombre de las iglesias de Italia, va a los familiares y a las hermanas combonianas, al P. Lorenzo y al P. Loris y a todos los misioneros que permanecen en tantos países para dar testimonio de amor y esperanza”, añadió el presidente de la CEI.
Por último, el Cardenal invitó a recordarlos en nuestras oraciones y expresar “solidaridad porque caminan con nosotros y nos ayudan a llegar a las periferias desde las que podemos entender quiénes somos y elegir cómo ser discípulos de Jesús”.
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