Una realidad que no puede ocultarse es que actualmente los jóvenes piensan muy detenidamente el tema de contraer matrimonio y quizá influya un poco cómo han llevado su noviazgo, la etapa en la que se conoce un poco mejor a la pareja con la que algún día se casarán. Sin embargo, quitando miedos y poniendo a Dios en medio de los dos, los novios pueden llegar a ser santos. para eso, te dejamos algunos tips que te serán de mucha utilidad.
1Recen juntos
Tal vez parezca raro, pero solo al principio, pues las parejas que hablan con Dios tienen la garantía de que sus oraciones le serán agradables al Señor y los escuchará, porque «donde dos o más se reúnen en mi nombre, ahí estoy yo, en medio de ellos» (Mt 18, 29).
2Hablen de temas importantes
Solo podemos conocer a las personas si nos comunicamos abiertamente, sobre todo cuando tocamos temas decisivos en nuestras vidas, incluyendo los sueños, metas, gustos, y los más profundos como religión, finanzas, hijos, pero también, con mucha caridad, de lo que no les gusta de su pareja y de todo lo que pudiera significar un problema futuro para que no haya sorpresas desagradables.
3Trátense con respeto
Es de suma importancia este punto, porque cuando se grita o golpea, aunque sea de broma, la relación comienza a decaer. Hay límites que no se deben sobrepasar y este es fundamental. Tampoco se permitan apodos porque sin tener la intención, pueden resultar ofensivos, mejor llámense por sus nombres, que bastante trabajo le costó a sus papás escogérselos como para sustituirlos con algún mote sin sentido.
4Sean castos
Las relaciones sexuales devalúan el amor. Cuando no hay compromiso matrimonial de por medio, lo único que sucede es que se están usando mutuamente para satisfacer un instinto, que les dejará un gran vacío espiritual. En cambio, cuando contraigan matrimonio, cualquier caricia que se prodiguen será agradable a Dios y les ayudará a alcanzar la salvación porque ya no serán dos sino uno solo (Mt 19,5).
5Cuiden sus amistades
Ser novios no significa alejarse del mundo para ser exclusivos, por lo contrario, esa relación debe ayudarlos a crecer como personas y ampliar sus horizontes, porque comenzarán a tener amigos en común. Por lo mismo, busquen personas que de verdad se alegran de verlos juntos y aléjense de quienes les hable mal de su pareja o les insinúa situaciones que pueda poner en peligro su relación y su amistad con Dios, las malas compañías se acercan a nosotros a cualquier edad.
Seguramente se pueden agregar más acciones para santificar su noviazgo, compartan con nosotros qué más se les ocurre.
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