“Estamos a treinta de abril cumplido. ¡Alégrate, Dama que mayo ha venido! Ha venido mayo, el mes de las flores, para nuestra Madre traemos las mejores. Estas flores son, Madre Inmaculada, nuestros corazones, que por ti se abrasan”, dicen las primeras estrofas de la canción popular.
En un comunicado difundido por el Seminario de Toledo se explicó que esta iniciativa, denominada Mayos del Seminario, pretende ser un punto de partida con el que “nos unimos a la tradición que dedica el ‘mes de las flores’ a la Virgen María”.
“Desde hace tiempo, tomando la música de algunas de las localidades de la Mancha Alta, un seminarista compuso una letra peculiar, con retazos vocacionales y sacerdotales que dan un sabor particular a este canto entre nosotros”, se señala.
En el Seminario de Toledo es tradición que, a partir del 30 de abril, y a lo largo de todo el mes de mayo, “todas las noches hay un momento de oración mariana en nuestra casa. Utilizando los textos de la Palabra de Dios, del magisterio de los últimos Papas y con los cantos marianos del extenso repertorio de nuestra capilla musical, nos acercamos a nuestra Madre con la conciencia de ser depositarios de un amor especialísimo de la Virgen”.
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