, 27 May. 21 (ACI Prensa).- La Iglesia en el Líbano pidió ayuda a los Obispos de Europa ante la grave crisis que afronta el país y que puede poner en riesgo “los derechos individuales, colectivos y nacionales”.
La Asamblea de Patriarcas y Obispos Católicos en el Líbano (APECL) envió una carta al Cardenal Jean Claude Hollerich, presidente de la Comisión de las Conferencias Episcopales Europeas (COMECE), en la que expresaban su preocupación por la actual crisis política, social, sanitaria y económica que afronta el Líbano.
Según la Iglesia en el Líbano, la gravedad de la situación pone en peligro la propia identidad del país forjada por "el encuentro, la pluralidad y la fraternidad, lo que lo convierte en el lugar natural para el diálogo entre la diversidad de comunidades religiosas y culturales".
Además recordaron los repetidos llamamientos a la paz que ha hecho el Papa Francisco y pidió a la comunidad internacional, incluida la Unión Europea, apoyo para garantizar "el mantenimiento de sus derechos individuales, colectivos y nacionales, contribuyendo a la lucha contra la crisis económica, a la protección del tejido social y a la preservación de la identidad y especificidad del Líbano".
Los patriarcas y obispos católicos también destacaron la necesidad de apoyar la presencia cristiana en la región a través de las instituciones de la Iglesia "que están y siempre permanecerán al servicio de todos los ciudadanos, sin distinción ni discriminación, y seguirán trabajando incansablemente por el bien común".
Según precisaron en un comunicado enviado desde la COMECE, los obispos de la Unión Europea "comparten las preocupaciones de la Iglesia local en el Líbano y expresan su solidaridad con la sociedad libanesa, que se enriquece con un mosaico de comunidades, incluidos los refugiados sirios y palestinos".
Desde COMECE destacaron que “a falta de políticas y acciones públicas eficaces, la Iglesia y los actores religiosos, como Caritas Líbano y L'Œuvre d’Orient, están proporcionando servicios humanitarios indispensables a todas las comunidades”.
El P. Manuel Barrios, secretario general de COMECE, aseguró que "la crisis socioeconómica amplificada por la pandemia COVID-19 está planteando una amenaza existencial para muchas de sus operaciones” y por eso animó a la Unión Europea "a buscar formas creativas de compromiso y asociación con Iglesias y actores religiosos sobre el terreno”.
Publicar un comentario