Ha pagado un precio muy alto en lo que respecta a sacerdotes, religiosas y diáconos fallecidos por la Covid-19
Durante este tiempo, la única institución que ha llevado el conteo es el Centro Católico Multimedial (CCM), quien también se ha encargado, en la última década, de denunciar las agresiones, los secuestros, las intimidaciones y los asesinatos de sacerdotes en el país norteamericano.
En el reporte número 21 del CCM –que abarca hasta el 10 de septiembre de 2021—la Unidad de Investigación de este observatorio, da cuenta del fallecimiento por la Covid-19 de seis obispos, 251 sacerdotes / religiosos; 13 diáconos permanentes y diez religiosas.
Hasta esta fecha se tiene un total acumulado de obispos, sacerdotes, religiosas y diáconos permanentes de 280 decesos, con lo cual, la Iglesia que debe atender a una población católica cercana a cien millones de personas, se encuentra en desventaja.
Particular relajación
Este reporte número 21 del CCM (que comprende del 21 julio al 10 de septiembre) se da en un período de “particular relajación de medidas preventivas y la llamada tercera ola de contagios, en particular del cambio de los criterios sobre el semáforo epidemiológico por estados”.
Los autores de la investigación –puntual e incisiva- han recordado que la relajación “se convirtió en referente sin especial significado puesto que, en la practica y a pesar del incremento de personas contagiadas en este periodo, las autoridades dejaron a la responsabilidad de la ciudadanía, los cuidados estrictamente particulares y de asistir a la vacunación para enfrentar la enfermedad”.
También coincidió con el período de apertura de las escuelas y el retorno a las clases presenciales sin un plan federal establecido de manera concreta, por lo que muchos centros educativos han tenido que implementar sus propios modelos de atención a los alumnos y a los profesores.
Cabe resaltar que en México el total de casos de infecciones por la Covid-19 llega (según el conteo de la Johns Hopkins University) a 3.5 millones de personas y acumula ya 268,000 personas fallecidas.
JULIO CESAR AGUILAR | AFP
Semanas muy complicadas
En estos dos últimos meses, la Iglesia católica ha sufrido más contagios que en lo que va de la pandemia. Tanto así que el 30 de agosto pasado, el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro, tesorero de la Conferencia del Episcopado Mexicano y presidente de la Obra de Clérigos en Ayuda Solidaria -OCEAS- señaló que en las “ultimas tres semanas han sido realmente complicadas para la comunidad de nuestras diferentes diócesis”.
En el comunicado, el obispo Castro señala que han fallecido por falta de notificación oportuna. “El 98% de los casos Covid-19 que terminaron en defunción presentan tres características particulares: 1. No se vacunaron cuando correspondía. 2. Notificación tardía (saturación de oxígeno menor a 80) 3. Afectación mayor al 60% de la superficie pulmonar”.
El reporte coincide con los resultados generales de los últimos 28 días que han sido extraordinariamente letales para México, con 420,000 casos nuevos de contagio y cerca de 20,000 decesos.
Por lo demás, durante la pandemia, el episcopado mexicano ha perdido seis obispos, tres eméritos, un auxiliar y dos en ejercicio del gobierno pastoral. Hasta el 10 de septiembre eran 30 casos en el episcopado nacional quienes padecieron la enfermedad, seis fallecieron.
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