El obispo auxiliar de Barcelona falleció a las seis de la mañana del día 12 de febrero, patrona de Barcelona
La archidiócesis de Barcelona anunció esta mañana el fallecimiento de Antoni Vadell i Ferrer, obispo auxiliar de Barcelona y vicario general: «Ha fallecido en la paz del Señor tras una larga y dolorosa enfermedad».
«El Sr. Cardenal Arzobispo, el Sr. Cardenal Arzobispo emérito, los Sres. Obispos auxiliares, los sacerdotes y los diáconos lo hace saber a los fieles de la Iglesia para que lo encomienden a la misericordia del Señor. Próximamente, comunicaremos la fecha de celebración de las exequias en Barcelona y de los posteriores actos que tendrán lugar en Mallorca», muestra el comunicado.
Antoni Vadell anunció el pasado 16 de julio que se retiraba de su actividad pastoral de forma temporal para afrontar el tratamiento.
“En poco tiempo tendré que someterme a quimioterapia y posiblemente a una intervención quirúrgica, que me obligará a reducir mi actividad pastoral de forma temporal”.
La carta fue publicada por el arzobispado de Barcelona que dirige el cardenal Juan José Omella.
El obispo auxiliar leyó estos sucesos en su vida desde la fe:
“Le pido al Señor poder afrontar este momento de enfermedad sintiendo su compañía, intuyendo que todo esto es una llamada amorosa de Él para más amarle y seguirle. La recibo como una nueva misión, la de estar más cerca de su Cruz, bajo la protección de la Virgen María, pidiendo la intercesión del Beato Joan Roig y Diggle”.
En aquel momento recibió la llamada del Papa Francisco que le animó«a mi edad me necesita muy activo en la Iglesia”
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