México: la indignación nacional por tal posibilidad hace que las decisiones se paralicen
Los ministros de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) decidieron «aplazar» la discusión sobre la inconstitucionalidad de la instalación de representaciones del nacimiento de Jesús y otros símbolos religiosos en espacios públicos de México.
La presión, liderada por grupos de la sociedad civil y asumida por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), así como la indignación nacional por la posibilidad de que se cree jurisprudencia y, a la larga, se prohiban todo tipo de manifestaciones pública que tuvieran un sentido religioso, «convenció» a los ministros de retrasar la discusión del asunto.
El proyecto elaborado por el ministro Juan Luis González Alcántara, es la respuesta a un amparo interpuesto por la ONG Kanan Derechos Humanos contra los ayuntamientos de Mérida, Chocholá y Mocochá en el Estado de Yucatán.
Firmas y mensajes claros
El día anterior fueron entregadas más de 40,000 firmas a la SCJN en la que, básicamente, se pedía a los ministros que respetaran los principios básicos de la libertad religiosa, Quizá por ello, el aplazamiento de la discusión y votación del proyecto de sentencia.
«La práctica religiosa del pueblo (mexicano), con diversas tradiciones y costumbres, está impregnada de toda clase de celebraciones y expresiones de enorme riqueza que deben respetarse y preservarse«, dijo en un video el obispo de Cuernavaca y secretario general de la CEM, Ramón Castro.
Los obispos mexicanos en un comunicado previo habían expresado su «gran preocupación y rechazo» al proyecto del ministro González Alcántara, pues de aprobarse una resolución así, se estaría retrocediendo mucho en los derechos humanos en México.
«Bajo esta óptica se llegaría al extremo de legitimar la prohibición de colocar o portar un crucifijo o la imagen de la Virgen de Guadalupe o cualquier otra expresión o imagen religiosa de las distintas creencias, enfatizó el obispo Castro, quien, además, subrayó que la prohibición de la representación del nacimiento de Jesús en la Navidad «es un intento por privar al pueblo de sus expresiones religiosas más íntimas y sagradas».
¿Quedaría prohibida la Virgen de Guadalupe?
Con la expresión «Hoy prevaleció la libertad religiosa en México», el Frente Nacional por la Familia festejó la decisión de la Primera Sala de la SCJN, sin embargo llamó a no bajar la guardia porque la reposición del proyecto de sentencia, tanto como su discusión, podrían darse en los próximos días.
«En este momento en el que nuestro país está sufriendo el flagelo de la inseguridad y la violencia desbordada, el proyecto publicado por la Suprema Corte pretende limitar las expresiones y manifestaciones religiosas que son promotoras de la cultura de la paz y del amor entre los hombres», dijo en su video el obispo Castro.
Si la prohibición de la representación del nacimiento de Cristo se extendiera, quedarían prohibidas las peregrinaciones (como la del 12 de diciembre a la Basílica de Guadalupe, que reúne a cerca de 9 millones de personas), la representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa (Ciudad de México, con un millón de personas) y las miles de fiestas populares.
Intentos fallidos
«Al prohibir en espacios públicos cualquier símbolo de carácter religioso específico (…) se llegaría a la prohibición de colocar o llevar un crucifijo o una imagen de la Virgen de Guadalupe o cualquier otra expresión o imagen religiosa de las distintas creencias», dijo el obispo de Cuernavaca.
Y recordó algo esencial en México: «La prohibición de la representación del nacimiento de Jesús en Navidad, es un intento por privar al pueblo de sus expresiones religiosas más íntimas y sagradas».
La herida de la prohibición de las manifestaciones religiosas y de las celebraciones que impuso en 1926 la llamada «Ley Calles», sigue abierta en el pueblo mexicano. La persecución religiosa del general y presidente Plutarco Elías Calles motivó una guerra sangrienta que hoy se conoce como «Guerra Cristera».
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