Una iniciativa promovida entre la Arquidiócesis de Quito y la Pastoral Familiar. Una propuesta que vuelve a “golpear” corazones en medio del avance de la despenalización del aborto por violación en Ecuador
No es la primera vez que se hace, pero gesto vuelve a ser más que significativo. En los últimos días la localidad de Quito, Ecuador, vivió una nueva jornada cargada de emoción y cargada de respeto a la vida.
Se trató de la cristiana sepultura a 25 bebés que habían sido abortados y que se encontraban a resguardo en el departamento médico legal de la provincia de Pichincha, según recordó en lo previo la propia Arquidiócesis de Quito en su sitio web.
Con esta acción, a través de la iniciativa “Bebés al Cielo”, ya son unos 116 bebés abortados los que recibieron sepultura desde el año 2017. En ese sentido, se recuerda que en ese primer año fueron 51 los bebés; en 2018 40 y ahora 25 bebés enterrados entre 10 semanas de gestación y recién nacidos.
@arquidiocesisdequito
Inhumación y celebración eucarística
Detrás de “Bebés al Cielo” se encuentra la promoción de la Arquidiócesis de Quito y la Pastoral Familiar y tiene como objetivo reclamar a los bebés abortados y que fueron encontrados en la ciudad en diversos lugares y circunstancias.
Es por eso que la inhumación de los bebés que sucedió el pasado 21 de mayo se hizo luego de una celebración eucarística en los Jardines de Santa Rosa Camposanto. La misa estuvo presidida por el obispo auxiliar de Quito, monseñor Darío Echeverría.
A continuación algunas imágenes más:
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La ceremonia fue trasmitida en vivo a través de las diversas plataformas de la Arquidiócesis
Despenalización del aborto por violación
Lo acontecido con “Bebés al Cielo” se dio en plena pandemia del coronavirus y a poco tiempo de que la Corte Constitucional diera paso a la despenalización del aborto por violación. En lo previo a aquella ocasión la propia Iglesia había lanzado un llamado a la defensa del derecho a la vida.
Por su parte, el propio presidente electo de Ecuador, Guillermo Lasso, que asumió este lunes 24 de mayo, había comentado lo siguiente:
“Soy un hombre católico. Como tal, siempre he procurado actuar de acuerdo a los valores que dicta mi fe en todo lo que concierne a mi vida, mi familia y acción privada. Sin embargo, como presidente electo mantengo también un inquebrantable respeto a los valores democráticos y republicanos. Creo especialmente en principios como la laicidad del Estado y la separación de poderes. (…) Por ello, hoy quiero manifestar mi total respeto a lo resuelto por la Corte Constitucional de nuestro país”.
Es en medio de estas circunstancias donde una vez más el gesto se impone y no deja de interpelar. “Bebés al Cielo” vuelve a golpear corazones.
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