En relación a este terrible dolor, mientras su padre ahora está convencido de la hipótesis del suicidio por ahogamiento en Mississippi, Romina sigue creyendo que su hija sigue viva y escondida en algún lugar.
Tras la desaparición de su hija solo el rezo del Rosario consiguió dormirla
La cantante le recuerda a Maria con te cómo su familia, la mitad de origen mexicano por parte de su madre, estaba dedicada a la Virgen de Guadalupe, y lo cerca que se sintió de María en ese dramático momento:
Me volví hacia Nuestra Señora en 1994, después de la desaparición de mi hija Ylenia. Estaba perdida y no pude encontrar respuestas completas en ningún lado. Ni siquiera podía dormir. Así que fui a un monasterio en Nueva Orleans y les pregunté si tenían un rosario. Señalaron una gran pila de rosarios de plástico de colores. Elegí uno. Recitándolo, entonces, finalmente encontré una paz que me permitiría dormir, así como la certeza de que, al final, todo saldrá bien. Que el bien vence al mal. Todo el tiempo.
(Ibídem)
Gracias a la paz interior redescubierta, Romina retomó el camino de su vida, reconciliándose con Albano y reanudando solo una asociación artística con él .
Andrea Raffin | Shutterstock
Devoción de Romina Power a Nuestra Señora de Guadalupe
El santuario mariano con el que está profundamente vinculada sigue siendo el de Nuestra Señora de Guadalupe, pero descubrió con su hermana Taryn que en La Crosse, Wisconsin, donde vivía, hay un santuario dedicado a la Virgen venerada en México. Allí fue a rezar hace tres años, con motivo de la muerte de Taryn, que falleció de una leucemia en 2020.
«A menudo pinto a María con el Niño Jesús»
Romina Power es también una pintora consagrada y en varias ocasiones pintó a la Madre Celestial siempre con el Niño Jesús: «Hubo un período en el que pinté solo Madonnas» (María conte), impulsada por «esa sensación de paz y serenidad que infunde»( Ibidem ). Señala cómo la retrata:
Quería que su dulzura brillara. Pero también su renuncia a su destino, al destino de su hijo. La siento como la Madre de todos nosotros, no solo de Jesús. ¿Y quién, más que una madre, ama a sus hijos y los escucha?
(Maria con te)
Cuando San Juan Pablo II besó a Romina en la frente
No conoce bien al Papa Francisco, pero tenía un vínculo especial con San Juan Pablo II:
Quince años antes de conocerlo personalmente, soñaba con caminar y hablar con él. Me dio la Comunión tres veces. Cuando me acerqué a él en el escenario del estadio Maracaná y, según el protocolo, me incliné para besar su anillo, me tomó la cabeza y en cambio me besó en la frente.
(Ibídem)
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