Entrevista al premiado director de cine Pablo Moreno, artífice de ‘Petra de San José’
Pablo Moreno, salmantino de 38 años, se ha convertido en un narrador de historias de tono espiritual o religioso de gran relieve en el panorama nacional desde su épica A un Dios prohibido (2013), si bien es cierto que sus trabajos se han reconocido fuera de España, como ocurrió en diciembre pasado en los premios de cine católico Ave María Awards, cuando se alzó con el galardón a mejor director por su película Red de Libertad (2017).
Ahora ha filmado una muy atractiva historia, Petra de San José -llegará a los cines el 4 de febrero-, en torno a la beata Ana Josefa -fundadora de Madres de Desamparados y San José de la Montaña-, que elevó a los altares San Juan Pablo II en 1994 y de la que no existía documento audiovisual alguno. Como en otras ocasiones, Aleteia también ha estado con él.
He disfrutado mucho con su último trabajo, ¿pero cómo se origina ‘Petra de San José’?
Fue un proyecto inesperado, nuestros compañeros de Goya Producciones se pusieron en contacto con nosotros para afrontar esta singular historia. Entonces ocurrió lo que nadie se imaginaba, una pandemia mundial, que ralentizó un poco el proyecto. En este tiempo pudimos estudiarlo en profundidad y prepararnos para rodar la historia.
Fundación Telefamilia
¿Cómo fue el trabajo con los reconocidos guionistas Andrés Garrigó y Pedro Delgado?
El trabajo fue bueno, son gente que escucha y que están dispuestos a ajustar las ideas y los planteamientos del guion para que todo fluya al final. Conozco a Andrés desde hace casi 20 años, aún hoy me sigue sorprendiendo su energía e ilusión por esta profesión.
En el filme se aprecia una conversión tumbativa, al estilo de San Pablo. ¿Por qué cree que hoy no hay tantas conversiones ni vocaciones a la vida religiosa?
Efectivamente es una conversión y un cambio de tercio importante. Creo que es lo que hace interesante al personaje de Ana, su camino vocacional hasta convertirse en Petra.
Es verdad que hoy las cosas son distintas, el mundo se mueve a otro ritmo que antaño, han cambiado muchas cosas, las maneras de entender la vocación, por ejemplo. Personalmente creo que sigue habiendo vocaciones, son más difíciles de detectar porque son distintas, pero hay grandes laicos que están apostando toda su vida al servicio de la palabra, con acciones y obras absolutamente maravillosas.
Se trata de la primera película sobre la beata. ¿Por qué no se ha dado a conocer antes su historia?
Eso mismo me pregunto yo. Antes de este proyecto, tampoco conocía su vida, espero que ayude a mucha gente a descubrirla.
El largometraje cuenta con un elenco de fábula. ¿Cómo logró reunirlo y por qué se decidió por la joven Marian Arahuetes para encarnar el papel principal?
Son muy buenos actores y actrices, y Marian es una actriz fantástica, con experiencia y buen hacer. Ya había trabajado con ella en Red de Libertad, y en cuanto comenzamos a plantear el casting no cabía ninguna duda. Ella ha defendido el personaje con uñas y dientes y espero que eso se note en la pantalla.
Hace cuatro años me dijo que “el cine religioso en sí no existe” y hace unos meses un sacerdote español señaló que “el cine religioso está en franca decadencia”. ¿No cree que esta autocrítica aleja de los cines a los espectadores?
Sigo creyendo que el “cine religioso” no existe, porque creo que el hecho religioso es absolutamente desbordante y atraviesa los géneros de norte a sur, de este a oeste; es un elemento trascendental presente en muchísimas películas, de temáticas muy dispares. Me niego a aceptar que cada vez que sale una religiosa o sacerdote en pantalla, estemos hablando de cine religioso, aunque el elemento religioso y espiritual esté presente.
No sé si el “cine religioso” está en decadencia, creo que cada vez hay más producción y que es común ver varios estrenos de películas explícitamente religiosas cada año. La pregunta es, qué tipo de cine estamos haciendo. Soy más partidario de un tipo de cine para compartir la forma que tenemos los católicos de ver y sentir la vida, que el cine autoexcluyente, que limite que una persona que no esté cercana a la fe, pueda disfrutar de la película y sentirse cómoda.
Fundación Telefamilia
¿Por qué tengo que ir a ver su película?
Por qué es muy interesante y porque contiene muchos elementos que la hacen excepcional, a parte de entretenida y muy disfrutable.
¿Hay algún otro trabajo en mente?
A finales de este año estrenaremos La Sirvienta, que habla de Santa Vicenta María López Vicuña, fundadora de las Religiosas de María Inmaculada.
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