Mensaje por el Día Mundial de Oración por la salvaguardia de la creación, que se celebrará el 1 de septiembre
El Papa Francisco insta a los líderes mundiales a «escuchar a la ciencia y comenzar una transición rápida y justa para poner fin a la era de los combustibles fósiles», en un mensaje publicado el 25 de mayo de 2023 antes del Día Mundial de Oración por la salvaguardia de la creación, que se celebrará el 1 de septiembre. El Papa se refiere explícitamente al IPCC, que recientemente hizo sonar la alarma.
En este texto publicado en siete idiomas, el pontífice de 86 años llama a estar «junto a las víctimas de la injusticia ambiental y climática, y a poner fin a esta guerra sin sentido contra la creación». Un tema que ha estado muy presente desde el inicio del pontificado.
El Papa argentino también dedicó una encíclica a la ecología, Laudato Si’, en 2015, y regularmente siente pánico por las consecuencias del calentamiento global. Recientemente, el 18 de mayo, deploró el «impresionante desastre» de las inundaciones que afectaron a la región italiana de Emilia-Romaña.
«El uso desenfrenado de combustibles fósiles y la tala de bosques están provocando un aumento de las temperaturas y severas sequías», preocupa el jefe de la Iglesia católica, que señala en su mensaje «escasez de agua aterradora» y preocupado por el «secamiento» de los ríos.
El Papa denuncia un «consumismo rapaz, alimentado por corazones egoístas», que «trastorna el ciclo del agua del planeta». Habla en contra de las «industrias depredadoras» que «agotan y contaminan nuestras fuentes de agua potable a través de prácticas extremas como la fracturación hidráulica para la extracción de petróleo y gas, los megaproyectos de extracción descontrolados y la cría intensiva de animales».
El Papa 266 cita al Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), que acaba de publicar su sexto informe en marzo, subrayando la urgencia de actuar para evitar consecuencias irreversibles en el medio ambiente. «Podemos, debemos, evitar que sucedan las peores consecuencias», insiste el pontífice, haciéndose eco de la organización internacional.
Refiriéndose también a la cumbre climática COP28 de Naciones Unidas, prevista en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre, insta a los líderes políticos a «escuchar a la ciencia» y quiere el fin del uso de energías no renovables. Es «absurdo permitir que se siga explorando y ampliando infraestructura relacionada con los combustibles fósiles», insiste el pontífice argentino que lo ve como una «injusticia para los pobres y nuestros hijos».
Subrayando que «las naciones más ricas han acumulado una deuda ecológica», el pontífice llama a la transformación de «políticas económicas que favorecen el enriquecimiento escandaloso de unos pocos y el deterioro de las condiciones de vida de muchos».
Respeto ecológico
El Papa también anima a todos en todos los niveles a transformar sus «formas de vida». Aboga por «menos residuos y menos consumos innecesarios», por eliminar «los procesos productivos no sostenibles y tóxicos», por hacer «el uso más moderado posible de los recursos», por reciclar los residuos y por promover lo «ecológica y socialmente responsable». productos y servicios. Para el sucesor de Pedro, estas son «opciones positivas».
Para remediar los «pecados ecológicos», el obispo de Roma aboga por «respeto ecológico en cuatro direcciones: hacia Dios, hacia nuestros semejantes de hoy y de mañana, hacia toda la naturaleza y hacia nosotros mismos».
En este texto donde el Papa hace girar la metáfora del río, recuerda que la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación dará inicio al «Tiempo Ecuménico de la Creación», que se celebra cada año del 1 de septiembre al 4 de octubre, en relación con la Patriarcado Ortodoxo de Constantinopla. El lema de esta iniciativa de este año es «Que broten la justicia y la paz».
El pontífice señala también que la clausura de este «Tiempo de la Creación«, el 4 de octubre, fiesta de san Francisco de Asís, coincidirá con la apertura en Roma de la asamblea del Sínodo sobre la sinodalidad, un gran proyecto sobre la futuro de la Iglesia abierto en 2021. Y para llamar a «un río majestuoso de reflexión y renovación».
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