Las autoridades sanitarias del Vaticano iniciaron la campaña de inmunización contra el coronavirus en el atrio del Aula Pablo VI.
Las vacunas de Pfizer-BionTech llegaron al pequeño estado de la Ciudad del Vaticano, y, probablemente, el papa Francisco, 84 años y el papa emérito, Benedicto XVI, 94 años serán los primeros a ser inyectados. Ambos pastores por su edad mayor se encuentran entre las categorías que tienen la prioridad para recibir el preparado inmunizador.
Precisamente esta mañana, Francisco ha presidido la audiencia general sin fieles y a puertas cerradas desde la Biblioteca del Palacio Apostólico en el contexto actual de la crisis socio-sanitaria por la pandemia.
El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, confirmó a la prensa que la Dirección de Salud e Higiene inició la campaña de vacunación esta mañana en el atrio del Aula Pablo VI en el Vaticano.
En total, el territorio de la Santa Sede cuenta con unos 800 residentes, si bien los empleados que trabajan en alguno de los organismos de su jurisdicción suman cerca de 3000.
Por otro lado, el cardenal Crescenzio Sepe, arzobispo de Nápoles, ha dado positivo en la prueba de covid. Por esta razón, informó el diario local, Il Mattino, está observando un período de aislamiento según lo prescrito (13.01.2021).
«El cardenal – según fuentes de la Curia de Nápoles – es asintomático, no presenta ninguno de los síntomas típicos de Covid, y observará el período de aislamiento prescrito en su apartamento de la Curia. Dio positivo en uno de los controles a los que se somete periódicamente. Un nuevo examen está programado para dentro de unos diez días».
Hay otros miembros del Colegio Cardenalicio que han dado igualmente positivo a la prueba del coronavirus en las últimas semanas, como Francesco Montenegro, arzobispo de Agrigento y Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia.
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